viernes, 10 de octubre de 2008

continuacion: ramera

Aun no se daba cuenta que habia tomado la ruta incorrecta. Esa noche se encontraba caminando sin rumbo por la urbanizacion vecina...
-porque tan sobradita? ya no te acuerdas como gritabas ayer???.. ja..ja...

-callese viejo imbecil

-oie puta a mi no me vas a venir a hablar asi, por amor a tu trabajo deberias tratar bien a tus clientes..puta asquerosa....

-no me joda y dejeme en paz!

-ven aqui...VEN!..

-dejeme no me toque mierda!!!!

-callate zorra

-argghh!"#E.......(silencio)


La tomo por la fuerza de los brazos y le cerro la boca con su tosca mano de albañil. Ya no podia gritar; estaba dentro de un quinta muy oscura, lo suficiente como para que nadie la vea.
Sus piernas se agitaban, luchaban contra su regordeta figura pero no fueron suficientes como para quitarse de encima a esa bestia.

- ves??? asi acaban las perras malas....

-(silencio)

-no te costaba nada ser amable conmigo, ahora toma tu merecido.

"la kuki" asi la conocian por la urbanizacion nueva reforma, la necesidad la obligo a desempeñarse en ese trabajo tan gastado y antiguo, aunque mas que necesidad era su gran apetito sexual. Habia entrado al negocio 3 años atras, no era de nadie y era de todos. Alta, guapa, de cabellos negros, la boca siempre de rojo y con sus clasicos jeanes apretados. Asi era ella, una especie de "mujer fatal de barriada", al menos eso era minutos antes de los golpes que recibio esa noche....